El comienzo de tu libro
Este espacio, lo abrí para conocer a muchas personas, que tengan el deseo de compartir algo de sus vidas, de situaciones difíciles, de cambios, de sueños plantados en sus corazones, testimonios, de todo aquello que sabes que puedes contagiar o influenciar a otros con bien; con la finalidad de llegar a otras vidas, aquellos que aún no consideran estar listos para compartir sus historias o que en muchas ocasiones creen que no tienen nada que contar o alguna vez has pensado en frases como: " a las demás personas no les debería interesar mi historia". Si! por mucho tiempo yo también creí que a nadie le interesaba mi historia, hasta que rendí mi corazón al creador de todo cuanto existe, al que me escogió y el que me sostiene con su mano dia con dia. Ese creador que me formó con sus manos, también te formó a ti, sin medida él no tiene favoritos y si los tuviera quiero animarte a que seas un consentid@ por EL. Por eso a ti que estás leyendo estas líneas, quiero contarte la gran noticia que te escogieron sin que lo pidieras, que te amaron antes que tú le amaras.... No terminaría hoy de contarte todo lo que ÉL es, porque El es todo. Pero hay un reto para ti y para mi y es que si ya conoces de ÉL, puedas tambien ayudarme en este proyecto, no importa de qué País o Ciudad eres, lo único que interesa es tu corazón. No importa cuantos seguidores, si contestas o no; yo insistiré cada día que tenga la oportunidad de hacerlo. Por Favor no solo leas, escribe, comparte tu historia.
Aún no entiendo muchas cosas de Blog, pido disculpas si no se utilizarlo... Lo único que sé es que tengo un medio más para compartir de Jesús.
Dejo unas líneas para que escribas algo que desees compartir de tu historia.
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Efesios 1:4-8 DHH
Dios nos escogió en Cristo desde antes de la creación del mundo, para que fuéramos santos y sin defecto en su presencia. Por su amor, 5nos había destinado a ser adoptados como hijos suyos por medio de Jesucristo, hacia el cual nos ordenó, según la determinación bondadosa de su voluntad. 6Esto lo hizo para que alabemos siempre a Dios por su gloriosa bondad, con la cual nos bendijo mediante su amado Hijo. 7-8En Cristo, gracias a la sangre que derramó, tenemos la liberación y el perdón de los pecados. Pues Dios ha hecho desbordar sobre nosotros las riquezas de su generosidad, dándonos toda sabiduría y entendimiento,
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